Foto: MMA Fighting
Jake Paul sigue en su caminó para decir que ya no es solo un youtuber con guantes. En una noche cargada de expectativa y morbo, el estadounidense derrotó por decisión unánime a Julio César Chávez Jr. en una pelea de 10 asaltos que dominó de principio a fin.
Desde el primer round, Paul salió decidido a tomar el control. Se mantuvo activo, lanzando combinaciones constantes y aprovechando su juventud y preparación física. En cambio, Chávez Jr., mucho más reservado, apenas soltaba las manos y parecía confiar en que Paul se cansaría con el paso de los asaltos. Pero ese plan nunca funcionó.
Round tras round, el estadounidense fue sumando puntos y ganándose al público con su entrega. Aunque Chávez mostró un poco más de iniciativa hacia el final de la pelea, ya era demasiado tarde. Las tarjetas de los jueces no dejaron dudas: 99‑91, 98‑92 y 97‑93 a favor de Paul.
El resultado no sorprendió a nadie. Chávez Jr., que hace desde hace años que no muestra un nivel ni cercano al de su padre, lució lento, sin ideas y por momentos desmotivado. A diferencia de su rival, que viene tomando el boxeo cada vez más en serio y se nota en su preparación y su resistencia.
Después del combate, Jake Paul no ocultó su emoción. Agradeció a sus entrenadores, al público, y se atrevió a decir que está listo para buscar una pelea de campeonato. Incluso lanzó nombres grandes dentro del boxeo actual, como Gervonta Davis o Badou Jack, asegurando que su meta es ser campeón mundial.
Por su parte, Chávez Jr. dijo que su estrategia era “cansar a Jake” y luego atacarlo, pero reconoció que no lanzó suficientes golpes. La realidad es que la pelea dejó claro que, Chavez Jr. no tiene nada que hacer dentro de un ring.
Con esta victoria, Paul mejora su récord a 12 victorias y 1 derrota, y da otro paso en su camino por dejar atrás la etiqueta de “celebridad del internet” para convertirse en boxeador de verdad.
